No soy de los que creen en las patrias, a no ser que sean las patrias de derechos sociales ergo los derechos laborales, y menos aún en las patrias municipalistas que perjudican a todas las partes, por eso cuando hablo de pueblos de la zona lo hago con cariño y afecto.
Y por eso La Adrada es un pueblo que también quiero no solo por la cercanía que también, si no porque he ido mucho y me parece un pueblo maravilloso todo el. Yo no voy a entrar en rivalidades estériles con Sotillo ya que creo que lo que beneficia a uno beneficia al otro, y si destacar la colaboración leal en todos los campos que debe existir y creo yo que existe.
Por eso me atrevo a hablar de La Adrada en la relación (que podrían ser otras) con la Navidades y es que este pueblo esta "diseñado" para estas fechas tan entrañables que hemos pasado. Su castillo majestuoso, observa gustoso la lontananza como vigía el resto del Valle del Tiétar, se viste de gala en estas fechas quedando precioso. Le sacan partido y esto es muy bueno, como sacan partido a las vetustas calles que llevan siglos viéndonos pasar y llevan siglos festejando todas y cada una de las Navidades.
Ya se que el Sotillo hay patriotas municipalistas (en La Adrada también) que no les gusta eso de "de La Adrada" pero a mi me llena de orgullo (y satisfacción como diría el emérito) ese apellido porque es nuestra historia y nuestras raíces, y si no se entiende esto difícil es que se entienda eso de la colaboración.
La Adrada, me vuelve loco.
Trespassos
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