El PP gana las elecciones, pero sigue sin generar ilusión y es incapaz de recoger el descrédito del PSOE. Solo gana porque el sanchismo se hunde. Que Feijóo se lo haga mirar y piense si sus portavoces y su proyecto es capaz lograr gobernar, que no es solo formar gobierno...
Vox continúa su subida imparable. Recoge voto rural pero también el joven urbano. Conjugar claves que refuerzan al votante de derechas tradicional, junto al discurso social, anti-inmigración y anti-élites le funciona entre jóvenes y ex-abstencionistas. Ojo a las generales...
¿El PSOE? La suma de un candidato malo de solemnidad (no hay más que ver su reacción patética) con un sanchismo al que la corrupción y la desvergüenza de sus dirigentes le ha roto del todo las costuras, ya deshilachadas previamente por los pactos y cambios de guion permanente desde 2018, deja al PSOE con un futuro poco prometedor. El miedo a la extrema derecha no basta para resistir y la ciudadanía se divide entre quienes les detestan y quienes no les creen. Están mas cerca de competir con Vox por ser los segundos que de ser alternativa de gobierno.
El mundillo Podemos/IU lograr mejorar los resultados captando un pequeña parte de lo que se deja el PSOE pero vuelve a demostrar que tiene un techo claro. Muchos ex votantes socialistas se han quedado en casa antes de votar a la derecha o a Podemos. Son parte del problema.

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