Ávila, 24 de enero de 2020.- El presidente de la Diputación, Carlos García, se ha reunido con el director general de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de la Junta de Castilla y León, Rubén Rodríguez, para hacer seguimiento del convenio para la mejora integral de las áreas degradadas, las conocidas como escombreras, y como “punto de inflexión para crear las áreas de aportación de residuos que se crearán en todos los pueblos de menos de mil habitantes”, ha explicado García.
Al término del encuentro, el presidente ha anunciado que “en el segundo semestre se pondrá en funcionamiento la recogida selectiva en todos los municipios de la provincia del contenedor amarillo”, para lo que se están “dando los pasos”, como la obtención de los contenedores, la contratación del personal del Consorcio o la adquisición de camiones.
Todas estas acciones tratan, en palabras del presidente, de “dar una solución integral a la recogida y tratamiento selectivo de residuos”. Sobre las áreas de aportación, el presidente ha enumerado que contarán con tres contendores: residuos de construcción, voluminosos y restos de poda. “Queremos núcleos de población libres de contaminantes y residuos, y creemos firmemente en un medio ambiente sostenible, para lo que necesitamos la colaboración de todos los alcaldes”, ha apuntado.
Además de la creación paulatina de las áreas de aportación, para las que la Institución provincial destina 600.000 euros en 2020 y la misma cantidad en 2021, la Diputación se hace cargo, mientras tanto, del 50% de los costes de recogida y reciclado de esos residuos. El otro 50% corre a cargo de los consistorios.
Rubén Rodríguez, por su parte, ha señalado que “la intención es acabar con los paisajes degradados en nuestra preciosa Comunidad Autónoma” a causa de las escombreras, pero “lo más importante es que no nos quedamos en su eliminación, sino que habilitamos áreas para el reciclaje de residuos con la colaboración de los municipios, que deben ser los tramitadores de esos residuos”.
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