Fecha histórica, en la que se recuerda el germen del espíritu castellanista, de lo que hoy conocemos como Castilla y León.
Y la historia dice así…muerto Fernando El Católico, su nieto Carlos I se proclama rey de Castilla, tras la muerte de su padre Felipe El Hermoso y estando su madre Juana La Loca encerrada en Tordesillas. Carlos I educado en Flandes con muy poco conocimiento del idioma castellano y poco interés por las tierras castellanas, aumentó desorbitadamente los impuestos, otorgó cargos de confianza a extranjeros y desvió la recaudación hacia Europa para financiar su imperio. Esto generó un descontento de la población castellana y provocó la denominada “Guerra de las Comunidades” que desembocó en la Batalla de Villalar.
Las revueltas comuneras querían negociar con el Rey una bajada de los impuestos, en 1520 aprovechando la ausencia del rey Carlos I estalla la primera revuelta en Toledo, seguida por otras ciudades. En abril de 1521 la tropa comunera liderada por Padilla, Bravo y Maldonado, toman Torrelobaton donde se atrincheran y asediados por los imperialistas, deciden marchar hacia Toro, pero son alcanzados por las tropas del ejército de Carlos I en Villalar.
El 23 de abril de 1521 se produce la batalla que puso fin a la Guerra de las Comunidades contra Carlos I tras la caída de las tropas comuneras. Un día después, Padilla, Bravo y Maldonado, son ajusticiados en la plaza del Villalar.
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